
¿Por qué la labor de los periodistas independientes en México tiene un impacto significativo?
“Y te sorprendes, como si tú convocabas a una marcha por la paz para demandar, exigir el esclarecimiento del asesinato de un periodista, tenían más capacidad de convocatoria convocar una marcha a favor de Chapo. Entonces eso es terrible, eso es muy lamentable. Entonces no hay sociedad que acompañe el buen periodismo ¿Dónde están? (…)
- Griselda Triana
Griselda recuerda el último día que vio a su esposo, Javier Valdez, antes de que su voz fuera silenciada para siempre. Sus pasos resonaron por la puerta de su casa en Culiacán, un ritual cotidiano que se rompió el 15 de mayo de 2017. Ese día, el periodista, conocido por sus investigaciones sobre el narcotráfico y la violencia en México, fue asesinado a plena luz del día.
Desde entonces, Griselda ha luchado para encontrar justicia, pero lo que ha encontrado es un muro de indiferencia y la sombra de la impunidad que cubre la muerte de su esposo. “A la sociedad, realmente no le importa lo que le pase a una persona periodista", dice con voz firme, pero cargada de dolor. Triana relata las dificultades que vinieron a consecuencia del asesinato de su cónyuge a manos del narcotráfico. El suceso afectó su vida personal y laboral, por lo que sus redes de apoyo fueron parte de su consuelo hacia el abandono de su hogar y la construcción de una nueva vida.
“Pierdes todo, y más cuando existe un desplazamiento forzado, porque dejas no nada más los restos de ellos, sus cenizas. Dejas tu trabajo, dejas a tus hijos, dejas a tu mamá, a tu papá; dejas lo que un día fue tu hogar”. Griselda fue obligada a dejar su hogar en Culiacán después del asesinato de Javier, por las amenazas en su contra.
México es el país sin conflictos bélicos dónde es más peligroso ser periodista. Según Artículo 19, han muerto 47 periodistas en este sexenio. “Nada ha cambiado. Y lo más grave es que durante todo este sexenio, prácticamente todos los días, o todas las semanas, veíamos como desde el Parlamento Nacional se agredían a las personas periodistas”, dice Griselda. A decir de Paris Martínez, reportero especializado en la cobertura de violaciones a los Derechos Humanos, México es un país dónde siempre ha existido censura en contra de los periodistas. No se deja que hablen de temas libremente, y esto se puede ver como una guerra dentro de sí mismo. Una guerra entre los periodistas y el gobierno.
Hay muchas razones por las cuales se comete violencia en contra de los periodistas. La principal es por la censura. También sucede por el hecho de ser mujer, de igual forma que los feminicidios. Los datos enseñan que en Latinoamérica es un doble factor de riesgo el ser mujer y ser reportera. Otra razón es la asociación con el narcotráfico, y la cobertura de hechos que tengan que ver con esto. De igual manera, está asociada con la censura, pero es un fenómeno tan grande en este país que se debe de considerar de manera separada.
Esta violencia surge, también, porque a los grupos de poder político les es incómoda la actividad periodística. “Porque el periodismo ventila, echa a la luz”, declara Paris Martínez. La capacidad del periodismo para exponer la verdad y cuestionar el statu quo, se convierte en una amenaza para los poderosos que buscan proteger sus intereses. Resultando en violencia contra quienes se dedican a revelar lo que los poderosos intentan ocultar.
Por otro lado, las autoridades no han mostrado interés en resolver los casos de los periodistas desaparecidos y asesinados, como fue con el caso de Javier Valdés. Además de que la sociedad también se ha mostrado indiferente. “Es un golpeteo constante, permanente, con todo el aparato del Estado contra el ejercicio periodístico como el que ha habido en este sexenio, ese manto de protección ciudadana, que de por sí es débil, que de por sí es meramente simbólico, pero que existe, se va debilitando, desvaneciendo”, asegura el periodista Paris.
Quién sabe cuánto tiempo vuelva a pasar, si es que vuelve a pasar, para que la ciudadanía mexicana pueda tener garantizado el derecho a la transparencia”. Paris Martínez reflexiona sobre la eliminación de organismos dedicados a la protección de la transparencia, como lo son Notimex, y lo que está actualmente sucediendo con la reforma judicial.
A pesar de todas estas dificultades, existe un proyecto en México que busca ayudar a las personas periodistas que están en peligro. El Programa Por la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas (PDP) está asociado con la USAID, y este tiene tres
objetivos principales. Uno de ellos es de protección, uno de prevención, y otro de procuración de justicia. Son un proyecto que durará cinco años, hasta agosto de 2026, y trabajan con cinco estados: Chiapas, Coahuila, Chihuahua, Sonora y Oaxaca.
Este proyecto busca facilitar el trabajo de las instituciones gubernamentales. Con el fin de que esta iniciativa tenga éxito, ellos trabajan con organizaciones de la sociedad civil y medios independientes, los cuales operan por la libertad de expresión y acompañan casos de personas periodistas. Unas de estas organizaciones son Artículo 19 y Periodistas de a pie.
Gael Montiel, uno de los organizadores de este programa, comentó “lo que no se ve, no se atiende”, refiriéndose a visibilizar la violencia que existe en contra de las personas periodistas. De igual manera, resaltó que esta violencia no debe verse solamente como una agresión a personas individuales, sino como agresiones directas al derecho a la información. Por su parte, Pilar Arrese, la otra organizadora del PDP, sugirió que para revelar esta violencia en este proyecto, se debe recalcar la importancia del periodismo para los jóvenes.
El periodismo independiente se refiere a cualquier medio de comunicación, como lo es la televisión, la prensa crítica, la radio o los medios digitales, que no esté bajo la influencia del gobierno u otras fuentes de poder como personas influyentes o grandes empresas.
Este tipo de periodismo es fundamental para el ejercicio de la democracia, pues es una herramienta para generar debate público libre y bien informado. Ya que nos permite intercambiar ideas libremente y debatir diferentes perspectivas y asuntos alternativos para que los ciudadanos tengan la información necesaria para tomar decisiones asertivas en las urnas.
De acuerdo con la Unión por las Libertades Civiles de Europa (Liberties), una organización no gubernamental que vigila el cumplimiento de los derechos humanos para las personas en la Unión Europea, el periodismo independiente está amenazado, incluso en regiones con democracias consolidadas como la UE. Pues los gobiernos autoritarios constantemente tratan de silenciar el periodismo crítico.
Cuando un gobierno controla la información que consume su población, se traduce en control del voto de los ciudadanos. Y es en este punto que yace la importancia del periodismo independiente. Por eso es importante proteger el periodismo independiente para garantizar que los ciudadanos tengan conocimiento verídico y transparente de su gobierno y las acciones que lleva a cabo.
La protección del periodismo no solo es importante para la democracia, sino también para garantizar los derechos humanos y el acceso a información transparente. En un país como México, donde la violencia contra las personas periodistas es algo que se vive día a día, el periodismo transparente se vuelve aún más indispensable. A pesar de los riesgos que enfrentan, las personas periodistas continúan luchando por exponer las injusticias y revelar los fraudes o delitos que muchos buscan esconder. Su trabajo no es simplemente informar a los ciudadanos, sino también desafiar al poder y promover una sociedad más libre y justa.
Sin embargo, la violencia contra las personas periodistas no parece mejorar, ni en México ni en otros países del mundo. Las amenazas, la censura y la falta de protección por parte de las autoridades hacia las personas periodistas siguen siendo la triste realidad de muchos de ellos. Y esto hace que se limite su trabajo y se ponga en peligro la libertad de expresión. La labor de organizaciones como lo es la PDP, así como el apoyo de la sociedad, son fundamentales para asegurar que este medio no desaparezca y así proteger nuestros derechos humanos. Pero como señala Montiel, visibilizar la violencia y luchar por la protección para las personas periodistas no es solo cuestión de cuidar individuos sino también de defender el derecho a la información y a una sociedad bien informada.
A pesar de los esfuerzos por proteger a las personas periodistas, la verdad es que la justicia para muchos de ellos sigue sin jugar a su favor. La impunidad es uno de los problemas más grandes en esta lucha, ya que en México el 100% de desapariciones y el 90% de asesinatos a personas periodistas siguen sin resolverse, dice Griselda Triana. La falta de investigación y el desinterés por parte tanto de la sociedad como de las autoridades crean un entorno en el que los agresores saben que son inmunes a la justicia. Esto no solo pone en peligro a las personas periodistas, sino que pone el ejemplo a todos aquellos que buscan censurar a través de la violencia. Aún así, existen personas periodistas valientes, que se mantienen firmes en su lucha y valores, trabajando en contextos en donde no solo se ponen en riesgo a ellos, sino también a sus familias. Y todo esto para denunciar la corrupción, el crimen organizado y otras formas de abuso de poder; las ‘malayerbas’ como las llamaría Javier Valdez.
Su firmeza y resistencia no solo desafía a los que violentan en contra de ellos, sino también inspira a las nuevas generaciones a luchar y comprometerse por contar la verdad. Tristemente, si no hay una respuesta por parte de las autoridades correspondientes que garantice la seguridad, el periodismo seguirá siendo una profesión de riesgo; bajo constantes amenazas, debilitando la lucha por dar a conocer la verdad a este país y a sus ciudadanos.